Honduras seguirá gestionado ante Estados Unidos la ampliación del Estatuto de Protección Temporal (TPS) luego que fuera prorrogado solo por seis meses a unos 57.000 inmigrantes hondureños, anunció este martes el gobierno.
"Reiteramos nuestro compromiso para continuar con las gestiones ante el gobierno de Estados Unidos y lograr una decisión favorable para nuestros compatriotas" en ese país, afirmó la canciller María Agüero en una declaración sobre el anuncio estadounidense.
La ministra también explicó que Honduras seguirá "impulsando una reforma integral" que permita a los hondureños lograr residencia permanente en Estados Unidos.
"Nuestros compatriotas beneficiados son personas trabajadoras que por muchos años han mantenido un buen comportamiento", enfatizó Agüero.
El presidente Juan Orlando Hernández advirtió que la deportación de los hondureños si se acaba el TPS sería "contraproducente" con el Plan Alianza para la Prosperidad (APP).
La APP será un programa financiado por Estados Unidos, en principio con 750 millones de dólares, para crear oportunidades laborales y disuadir las migraciones desde los países del Triángulo Norte de Centroamérica (Guatemala, El Salvador y Honduras).
El programa fue creado luego de que estallara la llamada "crisis humanitaria" en 2014, cuando Estados Unidos detectó el ingreso de más de 68.000 menores no acompañados por adultos procedentes de los tres países afectados por la violencia de las pandillas y el narcotráfico.
La secretaria interina de Seguridad, Elaine Duke, anunció el lunes que Estados Unidos extendió por seis meses el TPS a partir de 5 de enero para los hondureños porque necesita "información adicional" para tomar una decisión.
Honduras ha sido beneficiada con 13 ampliaciones de 18 meses cada una del TPS y la última vencerá el 5 de enero del 2018.
El Estatuto fue creado por Estados Unidos para Honduras y Nicaragua para ayudar a ambos países luego que fueran azotados por el huracán Mitch en 1998. Otro programa fue otorgado a El Salvador tras sufrir daños por terremotos beneficiando a cerca de 200.000 personas.
Duke anunció el fin del programa para Nicaragua otorgando doce meses que vencen el 12 de enero del 1019 para "una transición ordenada" para que los nicaragüenses (más de 5.000) regularicen su residencia o regresen a su país "si es necesario".
Más de un millón hondureños residen en Estados Unidos, la mayoría ilegalmente, que el año pasado aportaron en remesas 4.000 millones de dólares a su país, equivalente al 18,5% del Producto Interno Bruto (PIB).